Presentaciones
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De un modo sintético quiero subrayar la
celebración de más de 60 salones y eventos,
muchos de los cuales tuvieron una gran
repercusión internacional en sectores como las
tecnologías de la información y la comunicación,
la industria agroalimentaria y la hostelería, la
salud, la química, el turismo, el apoyo a las
empresas y el emprendimiento, la moda o la
sostenibilidad urbana, por mencionar solo
algunos. Todos ellos inciden en la actividad
ciudadana, los servicios, el comercio, el
conocimiento, y representan sectores dinámicos
de nuestra economía.
La celebración del Mobile World Congress,
encuentro internacional de referencia para
las comunicaciones móviles, merece una
consideración específica: este evento contribuye
a situar Barcelona en el mapa de las ciudades
tecnológicas y a crear actividad, talento y
sinergias. Tenemos la voluntad, como es sabido,
de que Barcelona siga siendo la capital mundial
del móvil más allá de 2018, al menos hasta
2023. Trabajamos para ello con el consenso
y la colaboración de las administraciones y las
fuerzas políticas y sociales.
La actividad de Fira de
Barcelona contribuye
a dinamizar el clima
económico y favorece el
esfuerzo de las pequeñas
y medianas empresas y de
los emprendedores, de la
economía productiva, en
definitiva, y tiene que servir
aún más para superar la crisis
y generar empleo de calidad,
riqueza y bienestar
Más allá del evento, queremos aprovechar
la oportunidad que nos brinda ser la capital
mundial de móvil para que los beneficios que
se generan sean compartidos por toda la
ciudad. Hoy es una demanda ciudadana que
estos beneficios lleguen al conjunto de la ciudad
y durante todo el año y, a su vez, abrir espacios
de reflexión sobre la responsabilidad social
y los derechos laborales de las empresas que
participan en este y otros congresos.
Nuevos sectores
Quiero referirme a la estrategia de Fira
para captar grandes congresos y eventos
corporativos, especialmente en los ámbitos
de las ciencias de la salud y de la tecnología,
dos sectores en los que Barcelona y Cataluña
despuntan y por los que apuestan y que tienen
que ser uno de los sectores estratégicos que
necesita la ciudad para un cambio de modelo
productivo y para la creación de empleo
de calidad.
Nuestra ciudad tiene una dilatada tradición
en medicina, ciencias de la salud y biotecnología
y trabaja asimismo para ser una capital del
conocimiento y de la tecnología, como una
manifestación al servicio de las empresas, de
la sociedad y de la mejora de la calidad de vida
de las personas. A su vez la apuesta por nuevos
sectores vinculados a la eficiencia energética,
las energías renovables o la rehabilitación
energética puede ser una gran oportunidad
para dinamizar la economía de nuestra ciudad y
mejorar las condiciones de vida de los vecinos
y las vecinas.
En definitiva queremos una Fira también al
servicio de los ciudadanos y las ciudadanas
de Barcelona y que sitúe con mayor fuerza
la capital de Cataluña como grupo puntero
de ciudades altamente consideradas por su
reputación y atractivo, y también como referente
de ciudad de los derechos y del progreso
social. Barcelona tiene que apoyar el talento y
el conocimiento y todas aquellas iniciativas que
nos permitan avanzar como ciudad productiva,
sostenible, justa, inclusiva y equitativa.
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